Tan solo hace unos días hablaba con un amigo sobre la necesidad de separar la parte sumisa de la persona.
Según como sea esa persona, su carácter, pues quizás esté de acuerdo pero me miro y veo que soy un TODO, que mi parte sumisa no puede separarse de la persona y el carácter que tengo así como tampoco mi otro lado dominante.
No es tan sencillo hacer compartimentos estanco, no lo es para mí.
La persona que soy lo es en su parte sumisa y también en su lado dominante, no dejo de ser amable, dulce, sincera y muchísimas cosas más por ser la sumisa de mi DUEÑO o estar en fase dominante.
Recuerdo de un amigo que cuando me vio pensó que tenía cara de mala leche, y en ese momento tenía mil y una preguntas y miedos, iba la sumisa no la domina, iba yo, pues nunca dejo de ser yo, ya que esos dos lados forman parte de mi, me complementan.
Quizá tenga un puntito de bordería, pero es sinceridad por decir aquello que pienso, por comparar y cotejar mis ideas y las suyas, por no decir amen si no se logra mediante el dialogo que cambie de orilla, por ser preguntona, me ría hasta de mi propia sombra.
Somos un libro que a lo largo del tiempo se ha ido escribiendo en el, por mucho que se quiera no se puede borrar el pasado, pues este forma parte de como somos en la actualidad y de como seremos.
Nuestras experiencias nos hacen ser lo que somos, por eso creo que en mi caso no puedo ponerme en compartimentos estanco.
Alguna vez lo he intentado y he terminado haciendo como las botellas de cava cuando se abren.
Puede y tan solo puede que quien necesite reforzar su carácter tenga que separar, pero creo que sigue siendo lo mismo, aprender a crecer y que no te pise quien no debe, ser uno mismo con todas las consecuencias que ello puede traer.