viernes, 18 de junio de 2010

CANSADA, RECORDANDO, YENDO A LUGARES MEJORES Y PROCURANDO DESCANSAR.

Anoche cansada, rendida, bloqueada, derrotada, decidí acostarme un poco antes de seguir con aquello que tan cuesta arriba se me estaba poniendo.

Al intentar cerrar los ojos me fue imposible y vinieron a mi cabeza unas imagenes y recuerdos especiales.

Vino a mi cabeza aquel día de semana en que tanta nieve y frío hacía, ese día en que a la tarde, tras la clase había quedado con Vos, una tarde estupenda, pero lo que vino en concreto a mi cabeza fue la sorpresa que me tenía preparada, la forma en que me tomó por los hombros y me hizo avanzar hasta el cuarto de baño que tan solo era iluminado por la poca luz que se filtraba del pasillo.

Recuerde la forma en que me giré sorprendida hacia Vos tras haber visto una bañera llena de agua caliente, con su espuma.

Recuerdo la forma en que me quedé una vez más descuadrada por completo pues nunca me hubiera esperado tal cosa y mucho menos el cuidado y mimo que puso para que yo entrase en calor y me relajase tras unas semanas asquerosamente tensas.

Vino a mi memoria la parte en la que más disfruté luego, al darle yo toda serie de cuidados y atenciones, al jabonarle con cuidado, mimo, respeto y cariño.

También vino a mi recuerdo otra tarde especial, esa en la que le esperé en el hotel, esa en la que volvió a descolocarme totalmente al ser Vos quien me fuera quitando muy despacito la ropa, comenzando por las botas.

Siempre me descoloca mi DUEÑO, siempre voy pensando en ser yo quien entregue, quien le saque una sonrisa, esa que pocas veces me deja ver y que tanto me gusta (precisamente por ello la veo con cuentagotas), y no importa cuanto entregue, siempre me queda la sensación de haber entregado poco, de que Vos disteis más.

Siempre sabe cuando es el momento justo de exigir, de tomar y hasta donde, y cuando conviene recoger y recomponer esos trocitos de SUYA que están por los suelos, sin importarle el motivo por los que se han caído.

No se piensen que las sesiones y encuentros con mi DUEÑO son suaves y vainillas como estas que dejé entrever, no, lo que tiene mi DUEÑO es la virtud de descolocarme siempre.

Nunca sé cuales son sus planes, ni lo que ha pensado para ese día, ni tampoco que juguetes habrá sacado de las maletitas, por tanto siempre abro un gran abanico de posibilidades y formas de agradarle, de entregar incluso aquello que me rompe en miles de pedazos.

Estoy muy cansada, con ganas de acabar, de tener todo el tiempo para Él sin tener que mirar la agenda, sin que me vea con cara de cansancio, ese poder ir a dormir a una hora normal y de una vez cumplir sus recomendaciones,  pero pronto acabará y haré todas y cada una de sus indicaciones sin un "limite" que impida el cumplirlas.

Gracias mi DUEÑO por ese tiempo concedido desde septiembre, por esos ánimos cuando me veía flaquear, por frenar mi genio y hacerme frenar, por hacerme doblar de la forma tan sencilla en que lo hace, una forma que sigue asombrandome al comparar la que era y la que soy.

Gracias por iluminar el camino que he de seguir aunque algunas veces haga pequeños requiebros.

SUYA

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